miércoles, 9 de noviembre de 2011

Con un día, me bastaría para demostrártelo.


       Simplemente me valdría con un día a tu lado. Un día para hacer de todo menos perder el tiempo. Me valdría con que en ese día pudiera convencerte de querer estar conmigo el resto de tus días.. También me gustaría que en ese día, hubiera un preciso momento en el que se te escapara un beso, cuando menos te lo esperes, y mas lo lleve esperando yo. 


Me gustaría que fuera una tarde lluviosa, dentro de mi casa, o de la tuya, sobre un sofá sin cojines, y como recordarás, delante del espejo. 
Enfrente de  mi película favorita, bueno, también me valdría estar enfrente de tu película favorita.. Estar debajo de una manta, y abrazados y bien juntos, sintiéndonos uno al lado del otro.


En esa tarde me gustaría también dar un paseo, al mismo paso, mientras camináramos por cualquier calle, agarrando mi mano con tu mano, como si de un acordeón se tratara, y tu risa fuera la mejor de mis melodías, frenarnos en seco de repente y darnos un beso sin ser vistos por la gente.


Me gustaría seguir con nuestro paseo, pararnos un instante frente a algún escaparate, retomar el paseo y que me preguntaras cuanto costaba cualquier cosa. Entonces te contestaría que no me fijé, porque lo único que fui capaz de ver fue tu imagen reflejada en el escaparate, y aquello, no tenía precio.


Por último, me gustaría hacer de esa tarde, una tarde inolvidable, una tarde que no quieras que acabe, que me mires cuando me vaya a ir con expresión de tristeza a la cara y aproveches mi distracción para abrazarme fuerte en un intento por no dejarme ir, y me hagas perder todo... Menos la sonrisa. 



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